La sociedad está acostumbrada a rechazar y excluir al diferente. Esto lleva a que la manera en la que ve a las personas que son distintas, por alguna afección u otro motivo, se encuentre sesgada por una carga de prejuicios e información falsa que se naturalizan.
En esta nota, hablaremos puntualmente de todos los “mitos” que giran en torno al Síndrome de Down. Porque así como expresa nuestra colaboradora María Stroman de la ONG “Creando Luz”: “el primer paso para incluir, es conocer”.
El síndrome de Down es una enfermedad genética, y es una las anomalías cromosómicas más usuales. Quizás piensas que sabes sobre el Síndrome de Down, pero ¿realmente es así? ¡Lee la nota y ponte a prueba!
- “La esperanza de vida de las personas con Síndrome de Down es muchísimo más corta que la de una neurotipica”
Parcialmente mito: En los últimos años, se ha producido un notable aumento de la esperanza de vida de las personas con síndrome de Down. Ahora, su esperanza media de vida se acerca a la de las personas sin esta afección.
- “La personas con síndrome de Down, no viven en sus casas porque están internadas”
Mito: En la actualidad, las personas con síndrome de Down residen con sus familias y participan en actividades comunitarias educativas, profesionales, sociales y recreativas. Se integran en el sistema educativo normal y participan en deportes, campamentos, música, programas artísticos y todas las demás actividades de sus comunidades. Las personas con síndrome de Down desempeñan papeles importantes en sus familias y comunidades, contribuyendo socialmente de diversas maneras.
- “Las personas con síndrome de Down quedan en la etapa de aprendizaje de su niñez”
Mito: El aprendizaje es una experiencia continua para las personas con síndrome de Down, como lo es para cualquier otra persona. La idea de que un niño con síndrome de Down alcanza un estancamiento en su desarrollo o retrocede en su progreso se debe principalmente a un sistema educativo que ignora sus necesidades. La razón se atribuye a un programa educativo que no satisface las necesidades del alumno.
- “Las personas mayores tienen más posibilidades de tener un hijo o hija con síndrome de Down”
Verdad: La mayoría de los bebés que nacen con síndrome de Down son de mujeres menores de 35 años, porque suelen tener más hijosSin embargo, la incidencia de bebés que nacen con síndrome de Down aumenta a medida que aumenta la edad de la madre.
- “El síndrome de Down es un retraso mental”
Mito: La mayoría de las personas con síndrome de Down suelen tener una discapacidad intelectual de leve a moderada, lo que antes se conocía como “retraso”. Los educadores e investigadores siguen aprendiendo sobre todo el potencial educativo de las personas con síndrome de Down.
- “Para las personas con síndrome de Down es imposible trabajar o ser contratadas laboralmente”
Mito: Diferentes empresas buscan jóvenes adultos con síndrome de Down para cubrir diversos puestos en oficinas pequeñas y medianas, como bancos, empresas, residencias de ancianos, hoteles y restaurantes. También trabajan en la industria de la música y el entretenimiento, en puestos administrativos, en guarderías, en deportes y en la industria informática. El entusiasmo, la fiabilidad y el compromiso que las personas con síndrome de Down aportan a su trabajo son activos valiosos.
- “Las personas con síndrome de Down siempre están contentas”
Mito: Los individuos con síndrome de Down tienen emociones como cualquier otro individuo de la población. Sin embargo, pueden experimentar toda la gama de emociones con mayor intensidad. Responden positivamente a las expresiones de amistad y cariño, pero también les afecta negativamente el comportamiento desconsiderado, que puede herirles y molestarles.
- “Los adultos con síndrome de Down son incapaces de establecer relaciones interpersonales estrechas que conduzcan al matrimonio”
Mito: Las personas con síndrome de Down pueden tener citas, entablar relaciones sociales, formar parejas románticas e incluso casarse. Viven todos los vínculos amorosos del mismo modo que lo hace un neurotipico.
- “Los problemas que se asocian al síndrome de Down no tienen ningún tipo de cura”
Los avances científicos en la identificación de los genes del cromosoma 21 responsables de las características únicas del síndrome de Down indican un progreso prometedor en la investigación. Los científicos creen que muchos problemas relacionados con el síndrome de Down se mejorarán o evitarán en el futuro.
Quiénes aspiramos a una sociedad más inclusiva y menos prejuiciosa, debemos estar dispuestas a entender cómo se tejen nuestras creencias sobre todas las personas que se ven distintas a nosotros.
La mera repetición de lo que escuchamos, no solo puede pecar por falta de verdad, sino también eternizar estigmas que son tan perjudiciales para aquellos a los que se etiqueta como para la sociedad misma.
La diversidad que aportan a nuestro mundo las personas con Síndrome de Down posee una potencia que aún no ha sido aprovechada. Si bien la sociedad está cambiando, todavía hay quienes aún piensan que ninguno de ellos son capaces de trabajar o que son “retrasados”.
Es momento que empecemos a replantearnos nuestras creencias, y empezar a desandar nuestras propias ignorancias.